Sea cual sea el ámbito de actividad (químico, farmacéutico, cosmético, bioquímico, educativo, petroquímico, forense, industrial, agroalimentario, hospitalario, etc.), en los laboratorios se almacenan y manipulan multitud de productos. Por ello, los operarios están constantemente expuestos a riesgos químicos.
Ya sean explosivos, tóxicos, inflamables o corrosivos, los productos químicos pueden perjudicar la salud de quienes los manipulan.